MAC EN TRAIGUEN

Estoy dictando algunos talleres de liderazgo para socios del cluster forestal en Traiguén, una ciudad que está ubicada en Malleco, ente Victoria y Los Sauces, en la ruta a la cordillera de Nahuelbuta. Esta zona fue conocida alguna vez como el granero de Chile, lo que ameritó la llegada del ferrocarril y del primer banco que se conociera en la zona de La Frontera. Hay mestizaje con ingleses, suizos, italianos y franceses y una población indígena que subsiste en reducciones o comunidades periféricas. Hace un par de días me quedé prendado de un par de casas que lucían aún el esplendor de una arquitectura moderna para su época y de un desarrollo económico ya olvidado, que han sido puestas en valor y readecuadas en medio de otras edificaciones de alto valor patrimonial, incluída una que data del 1865. Descubrí ayer, que a pocos pasos del hermoso centro cultural en el que he trabajado, está el Museo de Arte Contemporáneo de la ciudad. Emplazado en una esquina, el edificio de escasa superficie me impresionó por su transparencia, que deja ver obras e instalaciones como invitando a recorrer sus pasillos breves y en ascenso. Es a su vez un tributo al nuevo carácter forestal de la zona y combina pino, ciprés y oregón. Más gratificado me sentí aun cuando pude leer que los arquitectos Ignacio Urzúa y Felipe Miranda, sus realizadores, tenías 29 y 27 años respectivamente.