SECRETISMO Y TRANSPARENCIA PUBLICA

7 de cada 10 de instituciones públicas chilenas requeridas de información por distintos tipos de ciudadanos NO responden a los pedidos, sólo un 5% deniega la petición por escrito y en un increíble 4% ni siquiera se pudo entregar la carta solicitándola . Estos datos son resultados del estudio realizado por la Corporación Participa, denominado Acceso a la Información Pública, que además de Chile incluyó a otros 9 países de varios continentes.

Nuestro país encabeza el ranking de NO RESPUESTAS entre las 10 naciones estudiadas con un elevado 69%, muy lejos del 24% exhibido por Bulgaria, el 37% de Perú y el 40% de Argentina. En resumen sólo un 17% de instituciones requeridas en Chile contestaron las solicitudes formuladas, lo que no significa que respondieran lo que se les solicitaba como información. Las empresas privadas de servicio pública y el poder judicial son de las entidades más secretistas y, de las que responden, todas en general lo hacen más allá del plazo de los 10 días, cuando el plazo legal es de 3 días hábiles.

Es habitual que más allá de las tendencias políticas, nuestro gestores y/o autoridades públicas consideren suyo el botín de la información pública. No deja de extrañar que una de las razones para alegrarnos por la democracia reconquistada era el acceso a la esfera de lo público en condiciones de igualdad, lo que deviene inexorablemente en disponer de información necesaria y suficiente. Pero nuestros políticos "demócratas" y muchos de ellos autodenominados "progresistas", deniegan el acceso a lo público, porque lo creen suyo, porque el partido importa más que los ciudadanos o porque sus propios intereses pesan más que la acción de transparencia y democracia. Así como la inequidad en la distribución del ingreso campea en lo económico, el secretismo se impone en la gestión pública, de alli la urgencia de modificar cuerpos legales, dar formación efectiva a los nuevos gestores públicos y entrenar a las y los ciudadanos para relacionarse con "sus" instituciones públicas de modo asertivo.